jueves, 3 de enero de 2008

David López, una buena noticia

Valía el empate y hasta el minuto 72 hasta lo dábamos por bueno a la vista de lo que estaba pasando sobre el campo. Fue en ese minuto cuando David López acertó a clavar un lanzamiento de falta en la misma escuadra del Hércules desatascando un partido que hasta entonces había seguido con fidelidad el guión típico de este tipo de citas. Fue una buena noticia la de la recuperación de la eficacia del ex osasunista a balón parado. Su precisión en este tipo de jugadas fue una de las razones por las que el Athletic se fijó en este jugador para ficharle, pero ha permanecido prácticamente inédito hasta ahora. Esperemos que le recuperación de su puntería tenga continuidad y David López sea por fin el centrocampista que, sin ir más lejos, volvió loca toda la defensa del Athletic cuando Osasuna visitó San Mamés el año pasado.
El segundo gol de Aduriz, de penalti y en los minutos de la basura, fue demasiado castigo para un Hércules que le dio más trabajo al Athletic de lo que refleja el marcador, hasta el punto de que durante muchos minutos, sobre todo en el primer tiempo, el equipo alicantino fue el que llevó la iniciativa, llegando incluso a estrellar un balón en el larguero.
No fue bueno el partido del Athletic, pero nadie esperaba que lo fuera. En estos casos todos somos bilardistas y priorizamos el resultado por encima de cualquier otra consideración. La Copa a estas alturas tiene muchas trampas como volvieron a comprobar el Real Madrid o el Sevilla, que arreglaron sus fiascos en el último minuto, sin olvidar al Barcelona, que no pasó del empate en el Camp Nou ante el Alcoyano. Por comparación, la clasificación del Athletic resulta brillante, pero nos equivocaríamos mucho si nos dejáramos cegar por ese falso brillo.

llévame a Menéame Menéame mira lo que se habla en la blogosfera Technorati: Copa lleva este post a los favoritos de Google GBookmarks: marcar

1 comentario:

Iñaki Murua dijo...

Ojo al dato (como decía un colega tuyo, famoso antaño): pitos al equipo (al margen de la anécdota del equivocado cambio, aunque Aritz venía con cara de sorpresa a la banda) y gritos desde la grada Norte de échale huevos y sin vividores.
Y es que, aunque no me gustaría personalizar, Ander Murillo será un gran chaval, su cara al ser sustituido era un poema, pero vaya juego que demostró.