viernes, 2 de marzo de 2012

El lío de las entradas, las colas en San Mamés
y la venta por internet

Vivimos tiempos de exageración y desmesura. El hecho más nimio se magnifica a través de los cada vez más omnipresentes altavoces mediáticos. Todo es noticia siempre que contribuya a alimentar la ilusión de que vivimos en una sociedad informada y que no afecte sus cimientos, claro. El fútbol es un formidable generador de esa clase de noticias de consumo inmediato, íntimamente emparentadas con el cotilleo y cada vez más alejadas del hecho deportivo. Entrenadores pagados de sí mismos que tienen más protagonismo en la sala de prensa que en el banquillo, periodistas devenidos en frikis que hacen del show su modus vivendi, directivos que alimentan rumores y egos mientras llevan a la ruina las instituciones que dirigen...hace tiempo que el fútbol dejó de ser de los futbolistas para quedar en manos de toda la patulea que les rodea.
Viene esta digresión a cuento de todo lo que ha ocurrido en torno a las famosas entradas para el partido de Manchester. El Athletic no es una excepción en estos tiempos desmedidos, es más, se diría que lidera algunos aspectos de la exageración, a veces para bien pero otras para mal, así que tampoco hay que extrañarse de nada.
Pocos casos de entusiasmo tan desmedido se habrán producido en el fútbol europeo por una eliminatoria de octavos de final de la segunda competición continental. Desde que el sorteo deparó la posibilidad de un cruce con el Manchester United se desató una especie de histeria que se ha ido retroalimentando sin que, a día de hoy, se sepa dónde y cómo puede terminar la cosa. Y, seamos sinceros, sin que tampoco se sepa a ciencia cierta a qué obedece todo esto, que ya empieza a tomar un penoso cariz de papanatismo, y lo que nos queda en el tiempo que falta para el partido. Si tomamos el dato de que los ingleses han remitido más entradas de las exigidas por la norma de la UEFA (el Athletic sacará a la venta 2.500 más el próximo lunes) podemos deducir que les sobran, o sea que el interés que ha despertado el partido en Manchester se ajusta más a la medida de unos octavos de final. Y eso que el Athletic es uno de los históricos del fútbol europeo, el más antiguo del fútbol peninsular, que mantiene una identidad única que seguro que envidian y admiran los tan tradicionales seguidores de los diablos rojos, y que la Catedral es un campo solo tres años más joven que el mitificado Teatro de los sueños. Es decir, que si es por historia, tradición o abolengo, el Athletic y sus seguidores no tienen nada que envidiar de su rival. El United tiene más títulos, eso sí, como el Barcelona o el Real Madrid, logrados tras renunciar a las esencias y abrazar el mercantilismo. En esencias no solo les ganamos a todos sino que les podemos mirar por encima del hombro.
Sin duda predispuesto por el entusiasmo general, fue el propio club el primero que alimentó la psicosis de las entradas alertando de su preocupación por un posible problema de orden público en las taquillas, o al menos, eso dijeron los medios que dijo el club, porque no se corresponde esa presunta preocupación con las medidas tomadas al respecto: unas cuantas vallas alrededor de las ventanillas.
Estaba claro que iba a haber colas, pero en este estado de cosas no podían ser unas colas normales, al uso de otros grandes partidos. Como había algo más de cuatro mil entradas a la venta, alguien decidió que había cuatro mil personas en la cola con la misma técnica contable que se utiliza para aforar manifestaciones, o sea, a o ojo de buen cubero y pensando en ajustar el titular. Todos los medios se han pasado horas dando por buena la cifra sin que nadie cayera en la cuenta de que se despachaba una entrada por carnet, sí, pero que cada persona podía presentar dos carnets. Y si alguien cayó en la cuenta poco le importó: una cola de cuatro mil tipos siempre da un titular mucho más lucido que una de dos mil. A las ocho de la tarde se vendió la última entrada. Hubo quien hizo la misma cola que para adquirir una localidad para el partido contra el Granada. La cuenta de los 4.000 al guano. ¿Alguien ha rectificado?. Para qué...
Ya está dicho que el Athletic es un club de tradiciones y entre ellas figura una que muchos aficionados y medios mantienen con especial fidelidad: en caso de duda Ibaigane es culpable. En cumplimiento de esta tradición desde el minuto uno menudearon las quejas por la mala organización del asunto y las acusaciones a la obsoleta maquinaria del club, desconocedora de las nuevas tecnologías que tan fácil hacen la vida a los compradores de entradas.
Voy a ser políticamente incorrecto. Siempre ha habido problemas para conseguir entradas en los partidos importantes y siempre ha habido colas en San Mamés cuando se avecinaba un encuentro especialmente interesante. Si la afición rojiblanca destaca por algo es por su entusiasmo y fidelidad. Pero la moda de las gaupasas es relativamente reciente. Diría que no se remonta a más de quince años. De memoria, se podría situar el estreno en el último partido de la temporada 97-98 cuando el Athletic logró su calificación para la Champions ante el Zaragoza. Los presuntos cuatro mil que pernoctaron a las puertas de San Mamés lo hicieron para obtener una entrada que les permitirá un viaje en el que por todos los conceptos gastarán unos cuatrocientos euros por cabeza calculando por abajo. No se trataba de una cola para obtener un empleo ni para conseguir un trasplante de riñón. Sarna con gusto no pica,decían en la postguerra. Lo que el club no puede calcular es cuándo se le ocurrirá ir a la taquilla al primero de la cola. En esta progresión, en un par de eliminatorias muy bien podríamos alcanzar las dos noches de gaupasa. Pretender que empleados del club acudan a ordenar la hilera es ponerles a los pies de los caballos según reza la tradición mencionada más arriba.
La alternativa de internet es la más barajada por todos como solución ideal para evitar lo que algunos han calificado como espectáculo tercermundista nada menos(en el tercer mundo estarían encantados de hacer una cola para poder gastarse cuatrocientos euros). El autor de la teoría debe de ser de la misma escuela del que contó a los que estaban en la cola. Según los datos del Eustat correspondientes a 2011, los usuarios de internet varones mayores de quince años eran en Bizkaia el 61 por cien de la población, porcentaje que se reducía al 50'8 por cien en el caso de las mujeres. La media de edad de la masa social del Athletic se situa en torno a los cincuenta años. Según el Eustat, en la franja de edad de mayores de cuarenta y cinco años el porcentaje de usuarios de internet se reducía en 2011 a un 33,2 por cien. Siguiendo con los datos del Instituto Vasco de Estadística el 61,9 por cien de las familias de Bizkaia dispone de ordenador en el hogar, pero solo el 56,8 dispone de conexión a internet. El 55 por cien cuenta con correo eléctronico en casa.
Nadie duda de que internet será la solución a medio plazo. De hecho, las cifras de utilización se han doblado desde 2002 y es razonable suponer que dentro de unos años su uso será tan universal como lo es ahora el del teléfono pero, de momento, parece complicado que pueda sustituir a los métodos tradicionales a la luz de la estadística. Si el Athletic decidiera mañana vender sus entradas por internet, se formaría una cola de socios en Ibaigane reclamando su derecho a comprar un boleto sin necesidad del pago añadido de una tarifa de banda ancha. Utilizar un método mixto, taquillas-internet es inviable. De hecho el Athletic renuncia siempre a utilizar la red de cajeros automáticos en los partidos problemáticos.
Por otra parte si la escasez de entradas suele alimentar siempre las sospechas hacia la Directiva, pese a que ésta desglose las que saca a la venta y las que se queda, de qué estaríamos hablando si las entradas se gestionaran por internet y se agotaran, digamos que en diez minutos.
No se trata de comparar, ni mucho menos, pero a la misma hora en la que en Bilbao se acusaba al Athletic de vivir en la penumbra de las cavernas, donde no llega la luz radiante de las nuevas tecnologías, en Donostia también hacían cola ante las taquillas de Anoeta para comprar una entrada para San Mamés sin que se tenga conocimiento de que nadie aprovechara el tiempo para hacer su sesuda aportación al mundo de las TIC y el I+D. Eso sí, la Real les agradeció el esfuerzo con un gorro y una bufanda a cada uno. Todo un detalle.
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7 comentarios:

Anónimo dijo...

Brillante artículo al que añado otro dato. El tremendo lio que se montó para conseguir entradas para ver a ACDC en el BEC. Se vendían exclusivamente por internet. Entonces se pidieron taquillas.

Juan Carlos Latxaga dijo...

Muchas gracias. No conocía esa historia de ACDC. Buena aportación al debate que demuestra que las cosas no son tan sencillas como piensa el personal.

Anónimo dijo...

Realmente creo hay un problema y que esto es solucionable. No estoy de acuerdo con seguir con la venta de entradas por taquilla. Por tanto no estoy de acuerdo con el artículo.

Para ústed y muchos otros no hay problema, y para otros si hay problema. Tan simple como eso.

Desde la perspectiva que hay socios ancianos, o socios a los que su salud no les acompaña, o que trabajan, o que trabajan y están de viaje por otros lares, socios que viven en el extraradio como Gernika,Durango, Lekeitio etc -18000 socios son de la periferia- etc etc...Por tanto la venta por taquillas hay que evitarla si es posible.

Se hace necesario que el club disponga de un protocolo de actuación para venta de entradas superiores en número a las centenas, y quiero decir con esto, cuando los socios deban pagar por la particularidad del encuentro.

Se me antoja que el club disponga un par de 902 o los que fueran necesarios al precio de un euro para que el socio se apunte cuando desea entrada para eventos de este calibre y luego se haga un sorteo pertimente legal. Y evitaríamos toneladas de horas haciendo el ganso con viaje incluído en algunos casos y desprópositos varios en razones adyacentes al trabajo y otras vicisitudes.

Por tanto...No estoy de acuerdo con tu artículo. Creo que en la vida todo es mejorable, y me la refanfifla lo que los demás clubes hagan, a mi me interesa lo que haga mi club y considero que este apartado es MEJORABLE y se debería estudiar soluciones por parte de la directiva.

Nº Socio 64.230.

El B. de L.

Juan Carlos Latxaga dijo...

En ningún lado del post podrá leer que yo haya escrito que no hay problema. Claro que hay problema, pero magnificado de una manera irresponsable o interesada. Es irresponsable, por ejemplo, afirmar que hay cuatro mil personas pasando la noche ante las taquillas cuando los hechos demuestran que probablemente no había ni mil y que no hacía falta que pasaran la noche para hacerse con una entrada. Hubo quien fue a las siete de la tarde y compró una tras cinco minutos de cola.
La alternativa del teléfono y el sorteo es, ahora mismo, más viable que la de internet y creo que el club la debería estudiar para ocasiones próximas. Digo estudiar porque tampoco estoy muy seguro de que sea una solución. El acudir a una taquilla siempre es una molestia, pero en algún momento habrá que recoger físicamente la entrada. Después de llamar al teléfono, apuntarse, ser agraciado en el sorteo, ¿cuándo y dónde se recoge la entrada? ¿Se le envía al socio a su domicilio? ¿Cómo se hace el cobro? ¿Cuánto cuesta la operación? ¿Viene el socio de Lekeitio a Bilbao dos horas antes del partido a recogerla en la taquilla? ¿Cuanto se tarda en identificar a cada socio a través de una llamada de teléfono? ¿Cómo se gestiona todo eso?.
¿Por qué el club renuncia al sistema de cajeros automáticos (los hay en todas partes) cuando está ante un partido problemático? Supongo que tendrán razones de peso para hacerlo.
Claro que hay un problema y que todo es mejorable, pero la solución no debe de ser tan sencilla cuando nadie acierta a ofrecer una razonable. Y lo que me niego a creer es que en el club no le hayan dado vueltas a este tema desde hace muchos años.

Odriozola dijo...

Joder, chico no he podido sustraerme, aqui a vaios miles de km's, de seguir la actualidad de nuestro Athletic a traves de tus posts. Es que me parecen muy buenos !!!.. Y lo vuelvo a decir. Bien escritos y con cierta clase.

Estoy de acuerdo, completemente, sobre la desmesura actual del futbol y sobre cómo, sus verdaderos protagonistas, el balón y sus artistas, han quedado diluidos. En cierta ocasión oí decir a Bielsa que a él le pagaban sólo por perder. O sea por soportar las criticas e iras de eso que se denomina entorno. Una pena todo esto.

Gontzal dijo...

Partiendo de la base de que ciertos medios (con nombre y apellidos, los irresponsables de casi siempre) generaron una alerta que el Club alimentó con una cautela preventiva innecesaria, sí creo que una combinación de Internet, Teléfono y los cajeros multiservicio de BBK es la solución.

Pienso que la retirada de la entrada física, paso final, como dices, podría hacerse con el Carnet de Socio en Taquillas de San Mamés o en cualquier cajero multiservicio, que la solicitud de entrada debiera poder hacerse vía Internet, vía telefónica, vía fax o correo electrónico o, directamente, en las propias taquillas de San Mamés.

En casos como este, en que la previsión de la demanda supere a la oferta, sería lo más cómodo. La final de Copa debiera ser la piedra de toque.

Y pienso que sería un sistema que no discriminaría a los socios y aficionados de localidades más lejanas, sean de Lekeitio o, incluso del mismo Bermeo ;-)

Eso sí, todo partiendo de la base de que sería necesario antes del sorteo conocer todos los detalles, desde cómo se va a realizar, hasta una exposición publica de la lista antes de procederse al dichoso sorteo.

Pienso en que esta directiva tiene afán de transparencia y de erradicar las sospechas. El nivel de explicaciones dado sobre el destino de entradas recibidas, dice bastante.

Aunque en un clima de histeria colectiva, de un éxodo que va a dejar a Moisés en un aprendiz, siempre habrá damnificado dispuesto a la bronca y comunicador ventajista frotándose las manos para hacer demagogia e información basada en mentiras.

Juan Carlos Latxaga dijo...

Odriozola, me alegro de verte por aquí, aunque físicamente estés tan lejos. Es lo que tiene internet, que ya no hay distancias.
Gontzal, yo insisto en que si la solución fuera tan sencilla hace tiempo que se habría tomado. Para ser directivo del Athletic no te piden carnet de masoquista. Hay que ponerse siempre en lo peor, o sea, en una multitud de 35.000 personas y en otra multitud de medios de comunicación dispuestos a buscar tres pies al gato. Combinación de internet, teléfono, correo electrónico, etc, dices. ¿Cuántos se apuntarían en todos los medios?. Todos. Cómo, quién, cuándo y cuántos gestionan todo eso. ¿Quién lo paga?. ¿No se formarían colas al recoger las entradas? No me valen ejemplos de conciertos, baloncestos ni similares. Aqui hablamos de muchísima más gente y de un eco mediático infinitamente superior.