miércoles, 4 de marzo de 2009

La meteorología se pone rojiblanca

Hoy es el día y los hados se han puesto de nuestra parte. Llueve y hace frío, o sea que se anuncia una noche caliente, como las de antes, en San Mamés. Claro que lo del barrillo y esas cosas era en tiempos en los que los equipos respondían a una serie de características vitales que conformaban su personalidad. Con este tiempo climatológico, hace veinticinco años nadie hubiera dudado de que al Sevilla esta noche le caían cuatro en San Mamés. Era cuando el Athletic contaba con gente acostumbrada a jugar con katiuskas y en el Sevilla había mayoría de andaluces, maestros en jugarla de tacón y acostumbrados a un Sánchez Pizjuán que muchas tardes parecía un descampado reseco.
Ahora es otra cosa. Ahora, en cualquier equipo tienen gente acostumbrada a jugar hasta con nieve, todos los campos son alfombras verdes y los equipos han difuminado su personalidad hasta el extremo de hacerlos irreconocibles.
Pero me gusta que el día haya amanecido frío y lluvioso. En el fútbol sigue habiendo mucho de atavismo y no hay color entre llegar a San Mamés mojado y frotándote las manos para entrar en calor, que hacerlo aplatanado por el viento sur.
La meteorología ya está poniendo de su parte; la afición, también. El equipo tiene la palabra a partir de las ocho en punto.

llévame a Menéame Menéame mira lo que se habla en la blogosfera Technorati: Athletic lleva este post a los favoritos de Google GBookmarks: marcar

1 comentario:

Gontzal dijo...

Ya era hora, que estás de un radiofónico que no hay forma de leerte. 16 extranjeros tiene el Sevilla, nada más, nada menos. Pero el partido sí, huele al Athletic de leyenda. Que no nos fallen los jugadores que el resto poco más podemos hacer. Y, eso sí, que la rojez de las palmas no eviten la crónica de mañana.